Ya sabemos que los días lunes son «lentos» y para algunos «aterradores» nunca se sabe cuán larga se sentirá la jornada luego del breve relax del fin de semana y los pobres «lunes» tienen la peor de las famas.
Pero ya luego nos encontramos con el fin de semana, nada como echar un suspirito al aire y pensarnos que es mucho tiempo para sentirnos relajados y disfrutar un poco lo que la semana llena de trabajo no nos permite.
Quizá el domingo es un buen día, después de todo podemos levantarnos tarde y pasarla con la familia, pero sé que me darán la razón, ¿no es cierto que siempre el domingo parece recordarnos que está más cerca el lunes? atender que no me estoy quejando de ir al trabajo o a nuestras rutinas diarias, faltaba más, yo soy una adicta al trabajo!
Pero para mí, el mejor día es sin duda el sábado (aunque debo anotar que para mi el finde no empieza hasta el sábado al mediodia cuando al fin puedo acabar mi jornada semanal) ya podemos sentirnos relajados, levantarnos un poco más tarde, salir pausadamente que no habrá tanto tráfico y aún pensarnos en todo lo que tenemos pendiente por hacer, diligencias por llevar a cabo, cosillas que siempre están esperando por nosotros, ya el domingo nos parece lejano y nos sentimos o al menos nos pensamos que tenemos, como decía Manolo Otero «todo el tiempo del mundo».
Sábado o domingo que como parafraseaba otra canción, el domingo o el martes será cualquier día (lalalala) lo que cuenta es que hagamos de nuestros días cuan buenos deseamos y disfrutemos tanto como podamos. Dicho esto, desearles un buen empiezo de finde.
