Viajar es vivir han dicho contentos los hijos y el marido, incluida yo! cuando hemos vuelto luego de un fin de semana fuera del país, para unas mini vacaciones de fin de año, y claro! viajar es vivir, que manera estupenda de vivir no? visitar lugares hermosos y diferentes, conocer culturas fascinantes, gente que en algo es diferente, probar la gastronomía, las playas, el sol, si vas a la costa claro, que ya si vas a las montañas, el verde del campo y el azul del cielo te pueden conmover y mucho.
Viajar es vivir! vaya! quien le pegara al gordo de la lotería, y se emprendiera un viajecito por todo el orbe, seguro que al final sería cansadísimo pero de que sería maravilloso ni pensárselo dos veces. Saben? luego de algunos altibajos en la vida, me replantee las cosas, deje de negarme algunos caprichitos, y de atormentarme por tomarme para mi las cosas de los demás. No estoy diciendo que debamos despreocuparnos de aquellos a quienes estimamos, parientes y amigos, pero lo mío era, anoten que estoy en proceso de saneamiento, de lo más nocivo, la vida se me iba en ocuparme de la de todo el mundo, hasta que un día me encontré tirada de sopetón a la realidad, y pasando por muy tristes momentos, no les vengo a desanimar comenzado el año, los días siguen siendo a veces para mi muy duros y otros son muy buenos, al final la vida es lo que cuenta, así que…
Decidí comenzar a vivirmela bien, nadie sabe cuánto nos durará, tristemente caemos en cuenta de eso, cuando vemos que podemos perderla! y sobretodo me pensé que no debía postergar paseitos y disfrutes que no hacía antes, porque no quería, porque ya los haría en otra época, por esto y por aquello. Viajar es vivir, claro! pero lo más importante quizá no sea viajar, sino disfrutar la vida! y para eso no hace falta marcharse en globo alrededor del mundo, ni surcar los mares, la vida ya es un viaje! y disfrutarlo nuestro deber!
Feliz martes!
