El Señor López
Esta es mi historia, o parte de ella. Me llamo Claudia, si tuviera que describirme diría, tímida, sencilla, y el patito feo de la empresa…
Me encontré con su mirada de casualidad, en la oficina. El señor López Muñiz, ingeniero, y uno de los clientes principales de mi empresa, bueno, de la empresa donde trabajo.
Alto, simpático, charlatán, educado …. todo lo que una mujer busca en un hombre de 30 años o más.
Parezco tonta cuando lo veo, empiezo a tartamudear, apenas si me sale un hilo de voz al verlo, y balbuceo un tímido:
– Buenos días , se… se… señor López.
Te ríes siempre ,te ríes de mí, y no me molesta, hasta yo termino riéndome de mi misma.
No puedo negar que me gusta, me encanta! Desearía con todas mis ganas darle un besote, de esos que quitan el aire, y salir corriendo como niña que hace una travesura. Pero no puedo es solo un lindo sueño, solo eso…
Hoy llegaste a la oficina y me dijeron que preguntaste por mi,
yo como siempre llegué tarde culpa del colectivo.
Me contaron que pasaste temprano hoy , apenas abrió la oficina, y yo no te ví. Encima la duda me carcome, para qué habrás preguntado por mi ? Todo el día he pensado en eso, me ha costado concentrarme en mi trabajo por tu culpa.
El hombre más guapo que vi en mi vida, ha preguntado por mi!!! Mi cabeza empieza a lucubrar miles de historias, hipótesis para mi pregunta, qué quieres de mi ?
Si supieras todo lo que yo te quiero, esta tímida secretaria, esa que apenas saludas, y a la que se le cae la baba de solo verte, la que suspira profundo cada vez que oye esa voz tan varonil, que ni me atrevo a decir las sensaciones que produce en mi!!!
Llega la hora de cerrar la oficina, y me he quedado con la duda de saber a qué viniste esta mañana…
Soy una exagerada , ya sé , no me digan nada, todo el día pensando en él. Pero es que si lo conocieran estarían igual que yo!
Me levanto temprano, me ducho, desayuno, me visto.
– Voy a ponerme más guapa, por las dudas que pase por la oficina el señor López hoy – pienso en voz alta.
Salgo de casa apurada, hoy no quiero llegar tarde. Es la primera vez que deseo llegar a la oficina a trabajar. Todavía tengo la duda, que querrá el señor López?
Pasan las horas y nada. Llega el mediodía y salgo a comer, apurada, solo tengo una hora.
Cuando se abre la puerta del ascensor, me quedo inmóvil ¡El señor López!
– Ho , Ho , hola señor, buenos días!
– Hola, Claudia, como le va?
– Muy bien , se… señor ( que tonta soy dios no puedo ni hablar! )
– Ayer vine a preguntar por usted.
– Si? , no me habían dicho nada – miento para disimular mi curiosidad.
– Si , vine temprano tengo mucho que hacer y quería entregarle algo, es la primera de la oficina en enterarse, usted siempre tan amable conmigo, y tan servicial.
– A si? – balbuceo.
– Está muy guapa hoy, la veo diferente, me gusta.
Dios! se ha fijado en mi, el señor López me ha mirado!!!! Me tiemblan las piernas, me dan ganas de salir corriendo…
– Bueno Claudia, no le robo más tiempo, tiene que ir a almorzar usted, le entrego la invitación a mi boda, me gustaría mucho contar con su presencia, quiero acercarme más a usted, ya que luego de mi luna de miel, quiero hablarle seriamente, tengo una propuesta de trabajo y ….
Me quedé como hielo, dura y fría, no se cual de todas las palabras que el Señor López pronunciaba me sorprendía mas.
El casamiento o el trabajo?. Se casa el amor de mi vida! no puede ser! y al mismo tiempo, me pide que trabaje con él?
Vaya lío que surgió en mi cabeza, no se imaginan lo que pasa en esta mentecita en este momento.
Nos despedimos y sigo caminando para ir a comer. Comer? alguien piensa en comer ahora?
Tengo el estómago cerrado, hasta nauseas tengo, me siento mareada, confundida…
Se casa!!!! no puedo creerlo. Seguro que con una de esas señoritas finas y de sociedad, pienso…
Bueno para no aburrirlos, aquí estoy , sentada en el sillón de la oficina del señor LÓPEZ, soy ahora su secretaria privada.
Y si, el cumplió , cuando llegó de luna de miel, hablamos, me ofreció trabajar para él y aquí estoy.
Soy yo Claudia, la tímida, el patito feo, que se convirtió en cisne. Con su uniforme ajustado, su cabello suelto y algo más claro, digamos que algo más sexy y charlatana que antes. Hoy los hombres me miran.
El señor López se casó con la señorita fina y elegante, súper aburrida según me ha contado… Siempre me cuenta, me sienta en sus rodillas, y me cuenta, después me besa, me hace el amor, y seguimos trabajando…
No me casé con el , pero tengo lo mejor de él, el que quiera juzgar que juzgue, me da igual… a mi manera el SEÑOR LÓPEZ es mío …
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