Cuando alguien muere, una siempre quiero recordarlo, como solía ser….no como lo pensaría en su lecho fúnebre, sino con sus sonrisas, o con sus gestos, en los momentos felices. Hoy será el último adiós al rey del Pop, Michael Jackson muerto repentinamente. Ese adiós lejos de recordarnos a la gran estrella que desde niño, supo llegar a la gente con su enorme talento, en sus problemas de los últimos años, en las controversias alrededor de su persona, en la imágen del Michael que ya casi no conocíamos, recordaremos, aquellos pases de baile inigualables, aquella sonrisa que solía tener, aquella música que ni el tiempo alejará de nuestros oídos, y el carisma inagotable de Michael. Esta es la imágen de las millones de fotografías que tomaron a Michael a lo largo de su vida, la que más me gusta, así me lo pienso, bailando, cantando, haciendo lo que le gustaba y para lo que Dios le había dado un grandísimo y único talento.
Hoy como no se veía desde, han dicho los comentaristas, la llegada al hombre a la Luna o la muerte de Kennedy, el mundo entero seguirá las imágenes vía satelite del acto funerario en honor al rey del pop. Miles de personas se encuentran ya en el Staples Center, nada menos que 17,500 fans que acompañarán al rey en este último adiós, sin duda alguna eso habría hecho feliz a Michael, el amor incondicional de millones de fanáticos alrededor del mundo, que lloran a una estrella inigualable de la música.
