Y si, después de una fiesta lo único que nos quedan son los recuerdos de la noche, aquellas miradas cómplices con el chico por el que morimos, quizás algunos mensajes de texto intercambiados con “esa” persona especial y…la engorrosa tarea de “desproducirse”.
El ir divina a una reunión tiene su precio, y eso nos lleva a realizar fastidiosas acciones como desmaquillarse. La verdad, quizás si no fuera absolutamente necesario para el cuidado de nuestra piel no nos importaría despertarnos con el delineador corrido, pero es importante hacerlo para que nuestro cutis siga estando perfecto y sea la envidia de muchas.
Hay varias técnicas para demaquillarse correctamente, y cada una de ellas tiene sus secretos, los que revelaremos a continuación.
Muchas veces recurrimos a la famosa “leche desmaquilladora”, pero ésta no es imprescindible para realizar esta acción: si somos amantes de la frescura del agua, podemos utilizarla tranquilamente para desmaquillarnos y lograr excelentes resultados. Existen muchos productos realizados “al agua” que son muy efectivos y dejan la piel perfecta.
Lo que no es recomendable para la limpieza de nuestro rostro es el jabón de tocador, ya que no contiene los aceites necesarios para disolver el maquillaje, por lo que siempre deja restos de cosméticos. Su composición, además, suele ser demasiado alcalina, con un pH muy diferente al que tiene comúnmente la piel, lo que hace que nuestro cutis tarde alrededor de un día en recuperar su estado original.
Finalmente, terminaremos por recomendarles que utilicen agua tibia para la limpieza de su piel, ya que el agua caliente tenderá a resecarla. Sobre su cara humedecida, debe aplicar la crema limpiadora que haya seleccionado, haciendo círculos por toda la cara y luego enjuagar bien, para quitar cualquier tipo de restos de la crema.