En los últimos años, se ha puesto de moda utilizar fajas de nylon, y otros materiales durante la jornada de ejercicios aeróbicos o mientras se trota, y aún cuando se hacen rutinas de fisiculturismo.
Existe la errónea creencia de que las mismas, al propiciar mayor sudoración, contribuyen a bajar de peso aceleradamente. Esto no es en nada verdad, lo que sudas es agua, y pierdes eso, agua e importante cantidad de electrolitos.
Cuando vuelvas a beber agua, por poca que sea, recuperas ese peso que perdiste en líquidos al sudarlos en las fajas abdominales, así que si has de ejercitarte, cumple tus rutinas como recomiendan los médicos, con ropa cómoda que sujete el busto y que de facilidad a los movimientos de ejercicios que vas a hacer. El uso de dichas fajas, limita los movimientos.
Y por favor, hidratate bien al comenzar tus rutinas de ejercicio, y consulta al médico antes de someterte a una rutina luego de mucho tiempo inactiva.
