Cuidado con los transgénicos!

Los transgénicos son hoy muy populares, digo populares en el sentido que se encuentran en casi todos los comercios, aunque para muchos aún son desconocidos.   Como transgénico se define aquel producto, que ha sido alterado genéticamente u obtenido mediante dicho proceso.  Los dos más populares, el maíz y la soya.

Recientes estudios han demostrado que los transgénicos, causan algunos problemas de salud graves que se van dando a largo plazo, problemas géneticos que las mujeres que consuman los mismos pueden trasladar a sus hijos, y dañan irremediablemente el entorno ecológico.

La biotecnología se vislumbra para algunos, como la esperanza para erradicar las grandes zonas de hambre que existen en el mundo, para otros solo representa una forma peligrosa de paliar un problema y sobretodo la voracidad de las grandes industrias que se benefician de la biotecnología.  No sabemos hasta hoy a ciencia cierta que daños puede causar aparte de los que ya enumeramos.

Para algunos expertos los transgénicos son buenos y no hay peligro, para otros son peligrosos porque dañan el ambiente y adicionalmente alteran la salud de quien los consume.  Tómese en cuenta que en Europa países como España han desechado el consumo de los transgénicos mientras que en América, algunos países ni legislan para su control, y aún trabajan en favor de su desarrollo.

Alergías, cambios en el colesterol, la tensión y otros, son algunas de los efectos en la salud que denuncian los que se oponen a la comercialización de los transgénicos.  Como he dicho el asunto no está totalmente zanjado, no sabemos si son inocuos o son peligrosos totalmente.

No podemos librarnos del consumirlos, dado que el ciclo de alimentación siempre conlleva algo de estos productos.  Veamos existe la obligación por ley de que los productores rotulen sus productos, indicando «géneticamente modificados»con lo que se espera que el consumidor, decida por si mismo, si lo consume o no.

Aún así  podemos desechar comprar algunos y consumirlos, pero algunos tan populares como el maíz sirven de alimentación a los animales de campo y entonces, veremos que los derivados de dichos animales, llegan a nuestra mesa.  En una u otra forma tenemos a los transgénicos dentro de nuestra vida cotidiana.

Lo dicho, no se sabe si son buenos o malos, pero hasta que se tengan como dicen los productores «resultados concluyentes» mejor actuar con precaución.  Que quizá podrán paliar un poco el hambre en algunos lugares, y aún estarán por ahi en los supermercado como parte de los ingredientes de algún producto que consumimos, pero sino sabemos sus efectos, mejor nos ponemos atentos.

Asi que la próxima vez que vayas a hacer el «super» tomate el tiempo para leer las etiquetas! porque algo sí esta demostrado cada día aumentan los casos de alergías en las personas que han estado consumiendo transgénicos!  reitero mantenerse alerta con relación a ésto, para evitarnos daños que pueden ser graves.

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